Una impactante vista aérea de la espectacular sala de barricas de LAN es uno de los platos fuertes de la renovada propuesta de enoturismo que se puede disfrutar desde el mes de octubre. «LAN en tres letras», nombre de la experiencia que LAN inauguró en 2019, añade nuevas sensaciones y vivencias en torno al vino.

Un recorrido en ascensor panorámico revela uno de los secretos mejor guardados de la bodega: su magnífica sala de barricas, con un sistema de apilado, trasiega y climatización único en el mundo. El visitante podrá conocer los misterios encerrados en las barricas, dispuestas en pirámides, que atesoran los distintos vinos de LAN durante su crianza.

La sala de crianza alberga una extensa selección de distintos tipos de roble que permiten realizar una crianza personalizada, según el tipo de variedades de uva y las parcelas de las que proceden. Barricas de roble americano, francés, ruso, español y mixto –americano en las duelas y francés en los fondos- en cuyo empleo LAN es pionera.

Tras la experiencia en bodega, LAN acoge a sus invitados en LAN Bar y espacio de tienda, donde todo está preparado para disfrutar de la degustación de sus vinos. Los visitantes podrán relajarse en un ambiente de estilo cálido y natural logrado a través de materiales como piedra y madera, combinados con el tono fresco y verde de las plantas, que recuerdan la naturaleza y el respeto al medio ambiente, siempre presente en LAN desde su propio origen.