Ubicado en un área natural protegida de 30 hectáreas -incluidos 2 km de costa- Cap Rocat, el hotel más recóndito y privado del Mediterráneo, reanudaba nueva temporada el pasado 15 de abril. Tranquilidad, sencillez, reivindicación de los productos y valores autóctonos son las principales banderas de este lugar único, miembro de Small Luxury Hotels of the World.

Unas incomparables vistas al mar dentro de un entorno de gran riqueza patrimonial y natural esperan a todos aquellos que opten por alojarse en este alojamiento de lujo que se levanta sobre los edificios de la antigua fortaleza de Cap Enderrocat. La sencillez de la naturaleza fue la principal inspiración de Antonio Obrador, fuerza creativa de Cap Rocat, a la hora de desarrollar este proyecto, que, en su puesta en escena, defiende una depurada estética mallorquina.

Este referente del turismo de lujo en España cuenta con 30 habitaciones y suites, la mayoría de ellas emplazadas en las antiguas troneras de los cañones. Todas ellas ofrecen una terraza privada desde cuyos gacebos se puede disfrutar de inolvidables puestas de sol. En el enclave más exclusivo de este antiguo complejo militar se encuentra la “Suite el Cabo”, donde además de todas las comodidades propias de las suites, el huésped disfrutará de un amplio salón decorado con piezas exclusivas y de una piscina privada. Por su parte, la “Suite del Mar”, situada próxima a la playa de Cap Rocat, cuenta con jardines y piscina privada, así como magníficas vistas al mar y al huerto de hierbas aromáticas. Finalmente, «Las Centinelas» son tres impresionantes habitaciones ubicadas en los que fueran puestos de vigilancia de la fortaleza de Cap Enderrocat, excavados en la propia roca, y que ahora han sido transformadas en estancias de lujo siempre manteniendo el estilo único del hotel.

Una temporada más, Cap Rocat pone a disposición de sus clientes diferentes experiencias que harán la estancia en este refugio mediterráneo inolvidable. Para los más aventureros, las travesías a bordo de CR, el barco customizado por Antonio Obrador y que cuenta con patrón y capacidad de hasta 11 personas. Los huéspedes podrán realizar salidas de 4 u 8 horas con las que conocer el litoral mallorquín y descubrir algunas de las calas más increíbles de la isla solo accesibles desde el mar.

Para los que prefieran disfrutar al máximo de las instalaciones de Cap Rocat, además de la piscina de la muralla y el acceso directo al mar, no hay nada mejor que adentrarse en las exclusivas propuestas de su increíble spa. Este espacio ubicado en uno de los rincones más protegidos de la fortaleza, sumergido a 12 metros, excavado en la roca e iluminado de forma natural, invita a vivir un extraordinario viaje sensorial a través de diferentes experiencias. Tratamientos faciales, corporales y terapéuticos, tanto con productos naturales como de alta cosmética avanzada, prometen no dejar indiferente a todos aquellos que decidan mimarse durante su estancia en este oasis de paz.

Cap Rocat cuenta con dos restaurantes. Ambas propuestas, de la mano del chef Víctor García, nos acercan la esencia de la cocina mediterránea y la mallorquina en particular. La Fortaleza, galardonado con dos soles de la Guía Repsol, ofrece, tanto en su carta como en los dos menús degustación disponibles, una propuesta basada en la tradición y el producto autóctono. Por otra parte, en el restaurante Sea Club del Hotel, una de las terrazas de referencia de la isla, al borde del mar, el protagonismo es para los sabores de siempre, una cocina sencilla y natural donde destacan sus carnes y pescados a la parrilla, la caldereta, o los arroces, entre otros.

Desde su apertura Cap Rocat ha apostado por convertirse en un referente del turismo ecológico, defendiendo la flora y fauna de la zona de su enclave declarado Área Natural de Especial Interés. Esta filosofía de respeto por la naturaleza y orgullo por el patrimonio cultural y ecológico de Mallorca se ha materializado por ejemplo en el apoyo asociaciones como ONDINE y Save the Med Foundation, además de la contribución al estudio realizado en el entorno del hotel “Estudio de la Pastinaca en Mallorca”. También dentro de dentro de esta apuesta, el hotel lleva varios años introduciendo distintas iniciativas con las que disminuir su huella ecológica, con el objetivo a corto plazo de generar cero residuos de plástico. Por otra parte, todos los jabones y productos de cosmética son orgánicos y elaborados en Mallorca siguiendo la tradición artesanal, y se han establecido políticas estrictas en relación a los consumos eléctricos y de agua.

En 2017 la rehabilitación de la fortaleza de Cap Enderrocat  fue galardonada con el Premio Unión Europea de Patrimonio Cultural / Premios Europa Nostra 2017, en la categoría de conservación. El premio es el más prestigioso a nivel europeo en el campo del patrimonio y es concedido por la Comisión Europea para destacar proyectos que constituyan una aportación excepcional a la conservación o puesta en valor del patrimonio cultural y natural europeo.